El sector químico es uno de los más importantes para la economía española y uno de los más atractivos para profesionales cualificados del sector. Genera 629.000 empleos directos e indirectos en nuestro país, y se caracteriza por la estabilidad y calidad de los puestos, así como por unos salarios superiores a la media. Sin embargo, es un sector con una alta exigencia en la captación de perfiles, ya que se exige conocimiento y experiencia previa en la industria así como un perfil competencial muy completo. Los Business Developers, Export Managers, Key Account Managers, Project Leaders y R&D Managers son actualmente los puestos más demandados.
El sector químico es uno de los más importantes para la economía española, de hecho es la segunda industria en cifras de exportación de nuestro país, genera el 12,6% del PIB. En él, se engloban la industria farmacéutica, gases medicinales, fertilizantes, pesticidas, perfumería, cosmética, aceites esenciales, pinturas y adhesivos, entre otros.
A partir del 2008 con la crisis económica, atravesó por un momento delicado y se eliminaron numerosos puestos de trabajo, por lo que se apostó por la exportación a Europa, Asia y América incrementándola en un 40%. En el año 2016 debido al equilibrio entre el mercado exterior e interior comenzó a aumentar su producción en un 3% lo que supone una expectativa de crecimiento estable y ascendente en el tiempo que se está materializando en 2018 y con buenas perspectivas para 2019. El progreso del sector viene marcado por la exportación y la innovación, así como por su apuesta por el I+D+I.
La creación de empleos de calidad, uno de los mejores convenios y un empleo estable del 94% con salarios superiores a la media, hacen que este sector sea uno de los más atractivos en el mercado laboral para profesionales cualificados. Genera 629.000 empleos directos e indirectos, con un salario medio en torno a los 37.600 € brutos anuales, e invierte en 248 €/año por empleado en formación según el FEIQUE.
Este sector se caracteriza por ser muy riguroso en el reclutamiento de profesionales, a los que se exige siempre experiencia previa y conocimiento de la industria química. A esto se une el reto de encontrar a los candidatos que cuenten con el perfil competencial adecuado, algo que cada vez es más valorado en las organizaciones, que hasta hace poco daban más peso a la parte técnica. Además, debido al crecimiento continuo surge la necesidad de crear nuevos puestos de trabajo en las organizaciones y de captar talento de manera constante. Este escenario hace que encontrar al “mirlo blanco” sea todo un desafío.
Entre las posiciones más demandadas destacan los Business Developers, cuya función es el desarrollo del mercado en nuevos países y la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio; los Export Managers, encargados de la exportación del producto químico y los Key Account Managers, especializados en Ciencias Químicas y enfocados en llevar a cabo la venta técnica del portfolio de productos. En el área de Investigación y Desarrollo, los perfiles más solicitados corresponderían a los Project Leaders y los R&D Managers, que son los que lideran los proyectos de creación y desarrollo de nuevos productos.
En la actualidad nos encontramos ante una continua pugna por la búsqueda del talento, en la que la evaluación de las habilidades es fundamental para conseguir la máxima adecuación de los profesionales al puesto al que optan. Entre las competencias más requeridas destacan la capacidad de adaptación, polivalencia, capacidad de liderazgo, trabajo en equipo, capacidad analítica y orientación a resultados y cliente. Acorde a ello, las compañías invierten en la formación y contratación de profesionales con gran potencial que puedan ocupar en sus estructuras posiciones lo más transversales posibles.
Este sector químico, farmacéutico y en general la industria sanitaria se encuentran experimentando constantes cambios debido a la globalización y el gran impacto ocasionado por la incursión de las nuevas tecnologías en las organizaciones. La digitalización hace que todo cambie, desde el propio diseño del producto y su fabricación, hasta su enfoque en la posterior comercialización, ahorrando tiempo y dinero para las empresas. Sin duda, estos factores nos llevan a que la competencia digital se sume a las anteriores mencionadas como obligatorias para las nuevas incorporaciones y, de hecho, es una de las más valoradas actualmente.
Sin duda esta industria se caracteriza por buscar esa “química” entre el talento del candidato y la organización para cuyo éxito las empresas de gestión del talento ponemos a su disposición las últimas herramientas y soluciones innovadoras en Recursos Humanos. La evaluación por competencias, los test psicotécnicos, assessment online y presencial así como el asesoramiento personalizado son el mejor complemento que ofrecemos a las empresas con el objetivo de encontrar el potencial que requieren.
Eva Santos Hernández
Life Sciences Consultant – Morgan Philips Hudson Executive Search