¿Sientes que no dispones de tiempo propio, que tienes que gestionar una situación que te genera tensión –como un cambio de trabajo y la salida del anterior - o que estás constantemente estresado? Haz un ejercicio de mindfulness para reducir tu nivel de estrés, recuperar el control sobre tus pensamientos y concentrarte en lo esencial.
Encontramos cada vez más profesionales que se pasan la mayor parte del tiempo corriendo, desesperados por llegar todo y estar en todas partes a la vez, inquietos por cómo van a abordar una situación que aún no se ha producido, sin preocuparse realmente por el momento presente. Estos profesionales se enfocan siempre en el futuro, en el próximo paso, y no se concentran en lo que están haciendo en este instante. Este hábito de trabajar en modo “piloto automático” a menudo genera problemas físicos difíciles de manejar.
¿Tu mente parece una línea de metro en hora punta, con un montón de pensamientos yendo y viniendo, donde no tienes la oportunidad de hacer una pausa y recuperar el aliento? ¿Estás trabajando frenéticamente en proyectos, concentrado en el próximo punto de la agenda o en la próxima reunión sin considerar el esfuerzo físico y mental que estás realizando? Esos momentos en los que estás fuera del tiempo presente generan mucho estrés y nos desconectan de nosotros mismos y de nuestro entorno. Cuando tu mente está demasiado agitada, puede estresarte o impedir que desempeñes bien tu trabajo, ya sea dentro de una organización o en el proceso de búsqueda de un nuevo trabajo.
Cuando tu mente divaga, pagas el precio.
Entonces, ¿qué podemos hacer para centrarnos en lo importante y aumentar nuestra productividad?
Investigadores de la Universidad de Harvard han descubierto que la mente humana divaga el 47% del tiempo y, cuando te desvías, desafortunadamente pagas el precio. Cuando tu mente divaga, sientes más estrés e infelicidad que cuando estás conectado a tierra en el momento presente. Los investigadores de Harvard descubrieron que, en general, somos más felices cuando nos centramos en la actividad que estamos haciendo, en lugar de pensar en otras cosas.
Cuando estás atento y te involucras completamente en lo actual, experimentas tu mundo cotidiano de una manera completamente diferente. Y tu vida adquiere un nuevo brillo.
Por tanto, la forma en que usas tu mente en el trabajo marca la diferencia.
Mantenerte enfocado en el presente, en lugar de reflexionar sobre lo que ya sucedió (que no puedes cambiar de todos modos) o lo que podría suceder (lo que no puedes controlar), reduce el nivel de estrés, te hace más eficiente en el trabajo – o en la búsqueda del mismo - y hace que tu vida sea más satisfactoria.
Marcarse objetivos claros a realizar y trazar tiempos y metas realistas nos ayudará a priorizar y disfrutar del camino. Recuerda que le va mejor al que "trabaja de forma más inteligente, no más", Eso es lo que el entrenamiento de la atención plena puede ayudarte a hacer: se ha demostrado que un enfoque consciente del trabajo tiene enormes beneficios para los empleados a nivel individual, pero también para los equipos.
Y esto es lo que te podemos aportar con el desarrollo de un programa de onboarding, para las personas que se incorporan a tu compañía; o con el acompañamiento y la construcción de un plan de desarrollo Individual, para las personas que quieren seguir creciendo dentro de su organización; o con nuestros programas de Outplacement, para aquellos que han salido de la organización y tienen que buscar un nuevo rumbo o reto profesional. Si quieres saber más sobre alguno de nuestros programas contacta con nosotros.
Berta Ruiz, senior Consultant Morgan Philips Outplacement.
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